La elección de una buena cazuela marca una diferencia esencial en el resultado de cualquier receta, desde un sencillo guiso familiar hasta los asados más vistosos. En los últimos años, las cazuelas Fagor han ganado relevancia tanto en hogares como en cocinas profesionales gracias a su reputación, buena relación calidad/precio y versatilidad. Vamos a analizar algunos de sus modelos destacados en 2025, incluyendo alternativas de otras marcas para aportar una visión completa y realista tras haberlos probado todos en mi propia cocina.
Cómo elegir una cazuela para tu cocina
Antes de entrar en detalles, es clave comprender los aspectos que marcan la diferencia al seleccionar este utensilio:
- Material: Afecta la distribución del calor, la resistencia y la facilidad de limpieza. Las más comunes son de aluminio, acero inoxidable y acero esmaltado.
- Capacidad: Evalúa la cantidad de personas para la que sueles cocinar. Una cazuela de 2,5-3 litros es ideal para dos o tres, mientras que más de 4,5 litros es adecuada para familias.
- Compatibilidad con placas: No todas sirven para inducción. Asegúrate de que sea apta para tus fuegos (gas, inducción, vitro…)
- Tapa: Las tapas de vidrio permiten controlar la cocción sin destapar, muy útil para aprovechar el calor.
- Asas: Imprescindibles que sean ergonómicas y, a poder ser, aislantes del calor.
- Antiadherente: Facilita el cocinado y la limpieza, pero atención a la calidad de la capa y la ausencia de tóxicos como PFOA.
El error más común es guiarse solo por el precio o el tamaño. Un modelo barato pero con asas que queman o mala distribución del calor terminará siendo un quebradero de cabeza. Es preferible invertir en un modelo que realmente aporte buenas sensaciones duraderas.
Fagor NewAge Rustidera/Asador rectangular 40 x 25 cm
Este modelo ha traído a mi cocina una renovación de los asados y estofados al horno. Sus dimensiones, 40 x 25 cm, permiten preparar piezas grandes de carne, pescado o incluso recetas para celebraciones familiares. El cuerpo de aluminio fundido destaca por su robustez y su excelente reacción a los cambios de temperatura.
El recubrimiento antiadherente bicapa funciona sorprendentemente bien. He experimentado con piezas de pollo con verduras y, al sacar el resultado, nada se queda pegado, hasta el punto de poder desglasar el fondo directamente para aprovechar jugos y salsas.
Uno de sus puntos más originales es el pomo aromatizador de la tapa de vidrio termo resistente. ¿En qué se traduce en uso real? Lleno el compartimento con algún líquido aromático (más allá de agua: puedes usar vino blanco, alguna infusión o incluso aceite con hierbas) y, durante el asado, el vapor infusiona los alimentos, aportando matices y evitando que se resequen. Es un detalle singular que se disfruta de verdad en platos gourmet y que antes solo había visto en utensilios de gama alta.
Otro aspecto, no menor, es la facilidad de limpieza. A pesar de algún «atropello» culinario, como dejar la cazuela en el horno más de la cuenta, un simple lavado manual basta, y la tapa es apta para lavavajillas. Una recomendación práctica: no olvides usar manoplas, ya que a pesar de que las asas disipan bien el calor, tras horno siempre están calientes.
Fagor Alaia Cazuela Inducción 24 cm, 4,5 Litros
Tras varias semanas de uso intensivo con todo tipo de recetas, es difícil encontrarle defectos. El acero inoxidable 18/10 se percibe sólido, y lo confirmo tanto por el peso en mano como por la distribución de calor, muy eficiente gracias al fondo difusor de triple capa. Esto se traduce en menos tiempo de cocción y resultados más uniformes, incluso en placas de inducción que a veces dejan «puntos fríos».
La capacidad de 4,5 litros resulta perfecta para familias: desde arroces caldosos hasta sopas, pasando por corralas de legumbres. La tapa de cristal permite controlar el proceso, evitando pérdidas de calor y energía. Algo que agradezco especialmente es que el cuerpo apenas retiene olores tras lavarse, a diferencia de algunas antiadherentes económicas.
Por su diseño todo terreno, la he puesto a prueba incluso en horno (sin tapa, ya que el cristal podría no soportar temperaturas muy altas), con resultados excelentes en gratinados y rustidos.
A destacar la facilidad de limpieza y el detalle de que no requiere apenas aceite para evitar que se peguen los alimentos. En resumen: robustez, eficiencia y mucha versatilidad, lo que convierte a esta cazuela en una aliada para el día a día y ocasiones especiales.
San Ignacio SG-8050 – Batería de Cocina, 3 cuerpos
He incluido este set porque, aunque no es de Fagor, se encuentra habitualmente en comparativas y como opción para quienes buscan soluciones económicas con buena funcionalidad. Consiste en una batería de tres cazuelas de acero inoxidable de tamaño medio.
La primera impresión es la ligereza, lo que puede ser una ventaja a la hora de manipularlas, pero en recetas que necesitan cocciones largas, he notado que el fondo no es tan grueso como en los modelos de Fagor, generando una cocción menos uniforme y riesgo de pegarse si no se controla bien. Son compatibles con inducción, pero sólo si la placa es sensible, y de hecho algunos han reportado que varía el resultado según el modelo de placa utilizada.
He probado cocer pasta, preparar crema de verduras y hacer algún guiso básico, y en ningún caso se ha desbordado líquido gracias a los bordes altos. Sin embargo, las asas pueden calentarse y recomiendo usar protección si se va a levantar cuando está caliente. También destaco como aspecto negativo que precisan montaje cuando llegan, aunque es sencillo.
Para quien busca una solución rápida, pequeña y por poco precio, puede ser suficiente, pero no esperes acabados robustos ni una durabilidad de por vida. Es recomendable para estudiantes, segundas residencias o personas que cocinen en pequeñas cantidades.
Algunas valoraciones tras meses de uso
- Muy ligeras y fáciles de lavar, aunque podrían resultar endebles si se buscan productos de larga duración.
- Relación calidad/precio adecuada si se aceptan los compromisos en acabados. No recomendables si buscas gama media/alta.
- Funcionan en diferentes cocinas según el modelo, pero mejor comprobar la compatibilidad específica con tu placa de inducción.
Fagor Alaia Cazuela Inducción 20 cm, 2,8 Litros
Perfecta si buscas precisión y menor tamaño. Esta cazuela ha casado muy bien en mi día a día para recetas rápidas, hervir pasta, preparar guisos para 2-3 personas o incluso como cazuela auxiliar cuando la grande está ocupada.
El fondo difusor de triple capa facilita la distribución eficiente y evita los temidos puntos de sobrecalentamiento. El acero inoxidable 18/10 aguanta bien los golpes y la limpieza frecuente (de hecho, va directo al lavavajillas tras cada uso, sin perder brillo ni mancharse de forma acusada).
La tapa de cristal es resistente y no se empaña con facilidad, aunque cuidado si la sometes a golpes térmicos bruscos. En general, es una opción redonda para familias pequeñas o para ampliar tu menaje con una cazuela versátil y de calidad profesional.
Fagor Optimax Cacerola Inducción 18 cm
Este modelo se presenta como una cazuela económica y de tamaño reducido (18 cm), con cuerpo de acero esmaltado y recubrimiento antiadherente XYLAN PLUS, libre de PFOA. Sirve para todo tipo de fuegos, incluido horno y lavavajillas. La tapa de cristal completa un conjunto funcional para quien busca utilidad a bajo coste, pero en mi experiencia la diferencia con gamas más alta se nota en el uso intensivo.
En cocciones breves y recetas sencillas cumple sin problemas, pero en elaboraciones de más de media hora las asas se calientan mucho. Este detalle puede suponer un inconveniente, ya que tendrás que emplear agarraderas siempre. Además, si la cazuela no se usa con cierta delicadeza (potencias de fuego altas, lavados agresivos…), el antiadherente termina deteriorándose antes de lo esperado y los alimentos pueden pegarse y quemarse. Lo veo útil para estudiantes o como segundo recipiente, pero no para quien cocina regularmente platos complejos.
Comparativa rápida entre modelos principales
Modelo | Material | Capacidad | Tapa | Compatibilidad | Puntos fuertes | Puntos débiles |
---|---|---|---|---|---|---|
Fagor NewAge Rustidera | Aluminio fundido | Grande (40×25 cm) | Vidrio, aromatizador | Horno, todo tipo de fuegos | Versatilidad horno/fuegos, antiadherente sobresaliente, posibilidad infusionar aromas | Algo pesada, precio medio-alto |
Fagor Alaia Inducción 24 cm | Acero inoxidable 18/10 | 4,5 L | Vidrio | Inducción, gas, vitro, lavavajillas | Durabilidad, uniforme, fácil limpiar | No apta para horno con tapa |
San Ignacio SG-8050 | Acero inoxidable | Pequeñas a medianas | Acero/vidrio según set | Gas, vitro, inducción (no todas las placas) | Muy ligeras, precio bajo | Calor no tan uniforme, asas calientan, menos duraderas |
Fagor Alaia Inducción 20 cm | Acero inoxidable 18/10 | 2,8 L | Vidrio | Inducción, gas, vitro, lavavajillas | Compacta, muy sólida, eficiencia energética | Capacidad limitada para gran familia |
Fagor Optimax 18 cm | Acero esmaltado con antiadherente | Pequeña | Vidrio | Inducción, gas, vitro, horno, lavavajillas | Económica, fácil limpiar mientras dura el antiadherente | Manejo incómodo por asas calientes, menor resistencia antiadherente |
Consejos personales para sacar el mejor partido a tu cazuela
- En cocciones largas, elige modelos con fondo grueso para evitar que los alimentos se peguen y lograr mejores sabores.
- Para asados o guisos aromáticos, un pomo aromatizador marca la diferencia, como en el modelo NewAge.
- No uses utensilios metálicos con recubrimientos antiadherentes, así evitarás que se deterioren rápidamente.
- Recuerda siempre controlar la compatibilidad con tu tipo de cocina; si tienes inducción, apuesta por acero inoxidable 18/10 que no falla.
- Prefiere tapas de vidrio templado si quieres vigilar recetas sin perder calor ni aroma.
Conclusión: ¿Cuál elegir según tus necesidades?
Después de probar cada una durante semanas, he aprendido que no existe una cazuela universal para todos los hogares. La Fagor NewAge Rustidera es insuperable para asados gracias a su tamaño y a las posibilidades del aromatizador. Si buscas robustez y un «todo-terreno» para diario, la Fagor Alaia de 24 cm es una inversión segura por su durabilidad y eficiencia. La cazuela de 20 cm es perfecta para hogares reducidos y resulta tremendamente práctica como complemento.
Para presupuestos ajustados o necesidades esporádicas, la San Ignacio SG-8050 es suficiente, pero no esperes resultados premium ni resistencia al uso intensivo. Finalmente, la Fagor Optimax sólo la recomendaría para quienes cocinen poco y muy ocasionalmente, ya que los acabados y el antiadherente no aguantan rutinas exigentes.
La clave está en equilibrar necesidades diarias, tipo de cocina y presupuesto. Sin duda una cazuela Fagor, sobre todo de la gama Alaia, aporta tranquilidad, fiabilidad y muchas posibilidades culinarias.
¿En qué platos destacan las cazuelas Fagor frente a otras marcas?
Las cazuelas Fagor sobresalen en cocciones largas como guisos, legumbres, arroces y asados gracias a su fondo difusor y materiales resistentes. El modelo NewAge, por su parte, es ideal para recetas de horno, donde el control de humedad y los aromas juega un papel crucial.
¿Cómo mantener en buen estado la capa antiadherente?
Es fundamental evitar utensilios metálicos y limpiar la cazuela a mano con esponjas suaves cuando sea posible. Deja que el recipiente se enfríe antes de lavar y nunca la expongas a cambios bruscos de temperatura.
¿Qué hacer si las asas se calientan demasiado?
El uso de manoplas de silicona es la mejor solución. Si el modelo elegido no incluye asas aislantes, mantén siempre unas a mano, sobre todo al sacar la cazuela del horno o tras cocciones largas.
¿Se pueden usar todas con placas de inducción?
Es imprescindible revisar la compatibilidad en la descripción del producto. Las gamas Fagor Alaia y Optimax lo son, pero en modelos de otras marcas económicas esta funcionalidad depende del fondo incorporado. Siempre utiliza el imán para comprobarlo antes de comprar.